En la búsqueda de la perfección, la única parte del cuerpo que parece más difícil de adelgazar es la cara. Puede ejercitarse todo lo que quiera, pero la cara es un área que necesita atención especial, generalmente con la ayuda de un médico.

Sin que muchos lo sepan, el Botox puede hacer maravillas en algo más que líneas y arrugas. El perfilamiento de rostro, que incluye adelgazamiento facial, es un tratamiento de Botox muy popular. Inicialmente se usó principalmente en pacientes de ascendencia asiática, pero ahora es muy popular para crear una cara afilado. Cuando se inyecta en los músculos maseteros (los músculos de la línea de la mandíbula) de manera circular, el Botox puede "adelgazar la cara". A menudo, los rellenos también se agregan a las mejillas para crear una apariencia equilibrada.

A diferencia de algo como la liposucción, que destruye permanentemente las células de grasa en el cuerpo, cuando se inyecta Botox en la cara, funcionan estrictamente en el músculo. Botox no interactúa con la grasa en la cara en absoluto.

Cuando se usa para este propósito de adelgazamiento facial, el inicio de los resultados y la longevidad es un poco más largo que cuando se usa Botox para suavizar las arrugas en la cara. Puede comenzar a ver una diferencia en la cara en aproximadamente 10 a 14 días y los resultados deberían durar entre cuatro y seis meses, pero pueden ser más largos.

Refinando una mandíbula cuadrada inyectando Botox en los músculos maseteros

Las inyecciones de Botox (toxina botulínica) directamente en el músculo reducen su contracción y, por lo tanto, reducen considerablemente su volumen y masa, lo que “ahueca” las mejillas. Las inyecciones de toxina botulínica son indoloras,  vemos una reducción en el volumen después de unos pocos días.